lunes, 28 de diciembre de 2009

Parar y sonreir como un crio


Fin de año esa época en que nos propondremos nuevos retos (que cumpliremos o no) y que haremos el repaso del año que acaba.

Pero yo fuí más allá, me paré, e hice un repaso más íntimo.
Recordé como era antes de perder esa ilusión infantil en la Navidad, en fechas mágicas.

Y sobre todo los sentimientos que vamos perdiendo poco a poco y que deberíamos mantener vivos a pesar de los años.

Escuchar a esa persona amiga que nos abre los ojos sin ánimo de dañar sino de dar un toque de atención. No deberíamos perder la humildad, esa que nos dice que no tenemos la posesión de la verdad suprema.

Y me puse a pensar y acabé sonriendo casi sin darme cuenta.

Recordé cuando rebozaba mis labios de azúcar momentos antes de que mi madre tomará una cuchara para echarse el azúcar en el café.
Y me dí cuenta de cuanto tiempo hacía que no realizaba la travesura jejejejeje.

Cuantas cosas hemos ido aparcando para vivir como "adultos". Hemos dejado que la pena venza a la alegría. Hemos aparcado pequeños sueños por grandes realidades.

He sido feliz haciendo un recorrido por mis sueños infantiles, porque dentro de mi alma encontré ese crío feliz, sonriente, con brillantes ojos azules.

Descubrí que tengo ganas aún de correr por el bosque de la mano del hada de la casa de la montaña buscando pequeños elfos.
Siempre creí que hay duendes, escondidos entre los matorrales, y cuando algo se movía decía ahí hay uno.

Así que debemos seguir pensando como los niños, que los milagros son posibles, que nadie tiene la razón suprema, que debemos VIVIR.

Gracias mil gracias

domingo, 20 de diciembre de 2009

Amistad


En nada o en casi nada tenemos una definición universal y la de la Amistad no es una excepción.

Para mi Amistad , es un sentimiento, tan fuerte como fuerte puede ser un sentimiento que nace de los más interno de nuestro ser. Porque nada ni nadie me obliga a ser amigo y, bueno, yo no se querer a medias.
Se que todo el mundo no piensa igual que yo, que no siente como yo la amistad,que incluso puedo verlo como algo sucio por confusión, es comprensible. Lo que no pueden pretender es que yo cambie mi forma de dar mi amistad. Si tuviera que explicar a mi amig@ como siento la amistad sería algo así:

"Amistad para mí es regalarte mis manos para cobijar tu corazón, calentar tu alma con parte de la mía si es necesario, darte mi aliento para llenar tus pulmones, sostener tus manos cuando llores, abrazar tu cuerpo cuando el frío te quiera invadir, reir al vivir el momento ese momento que compartimos unidos en un abrazo, notando nuestros corazones como se hablan. Oyes? repite tu nombre con su carencia de palpitaciones, tu nombre sale del corazón. ¿Como puede entonces negarse que es un sentimiento?.
Es amor un amor elegido. Amig@s son la familia que escojemos, quienes nos llenan de esperanza.
Y podemos ser amigos entre hombres , entre mujeres o entre hombre y mujer. Puedo estar abrazado a mi amiga, en su cama, notando su piel, cálida, suave, con su olor suave de vida, sentir que podría amarla con pasión y, sin embargo, regalarnos nuestro amor de amigos, un amor inmenso. Un amor que me hace desear seguir, vivir, tener esperanza.
Así pienso yo, así que amiga , si me ves a tu lado, si me ves cerca, si notas que miro donde estas. No deseo molestar, no deseo agobiarte, deseo acompañar simplemente a mi amiga.
Y si no me ves, si no me oyes, solo debes parar , mirar la luna, amiga de tod@s, sentir que sigo donde tu me dejaste entrar una vez,en tu alma.
La amistad en mi , hizo su magia, te dejé entrar en ella, amiga mía, y transformaste las negras paredes que cobijaban mi alma agonizante ,en un salón blanco, pleno de luz y esperanza. Y dentro, mi alma con el sabor de tus besos.

Que es para mí la amistad?????? Cierra los ojos,mirate por dentro , eso es amistad."



martes, 15 de diciembre de 2009

Un día másun dia menos


Un dia más, un dia menos. Nunca tuve claro como calcular el tiempo, si medir lo pasado o medir lo que queda.
Hoy quiero hablarme a mi mismo, en realidad es lo único que me queda por hacer sin que me dañe demasiado.
Quiero sentarme frente al mar, quiero mezclar el agua salada con mis lágrimas, llorar hasta acabar mi fuente de lágrimas, y reconocer que me vacié al llorar lágrimas de sangre púrpura.
Quiero ver pasar el aire, quiero cerrar los ojos y no oir nada, ni nadie, quiero sentir como se desvanecen sueños imposibles, recuerdos que queman, esperanzas que jamá llegarán.
Quiero tener fuerzas para levantarme tan solo un día más, solo uno, uno que me permita despedirme de todo lo que me hace sentirme extraño.
Quiero ser invisible, quiero no tener alma, quiero no sentir el ruido de mi corazón al amar.
Quiero no sentir pena, quiero no dar pena.
Quiero caminar sin pensar, pensar sin sentir, sentir sin más.
Quiero acabar el día sin más proyecto que despertar al otro día, quiero tener ganas de despertar al otro día.
Quiero, quiero, quiero... vaya tontería si en 40 años no tuve lo que quise qué hará que sea diferente hoy???? Nada.
Cuando pueda secar del todo lo poco de alma que me queda podré seguir haciendo lo que me depende realmente de mí, escribir. Cuando estos rastrojos que ayer fué un alma desaparezcan podré dejr salir mis pensamientos. deseos muertos que debo sacar para que no pudran la carne que los cobijó.
Quiero no querer.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Ya no me importa




Tengo la impresión y no sé muy bien el por qué, de que las personas me ven "diferente".

No sabría explicar el como, pero a veces me siento que me están mintiendo, en como es una persona, y no entiendo el por qué.

También es verdad que ya no me importa. Pero si es cierto que antes si. Y me dolía hasta el respirar cuando me daba cuenta que era así.

Ahora imagino que alojo esos sentires en esa zona que se me ha secado, que ya no siente, que si lo intento con ganas incluso podría por poco que fuera, podría llegar a ser malo. Es mi meta jajajajajaja, ser malo.

Vale si reconozco que me cuesta incluso imaginarlo pero, lo deseo a veces. Es como si dentro de mí algo me dijera que así me tratarían diferente, me cansé de cargar con mentiras de otros, de pensar que alguien es de una forma y luego ves que no es así. Que con otras personas es totalmente diferente, es como me dijo que no quiere que sea yo jajajaja.

Pero lo realmente bueno, es que ya no me importa. Ni escribo las palabras que me gusta escribir, creo, que así me quedo demasiado al aire, demasiado expuesto.

Hoy desconfio de las personas y lo mejor... ya no me importa.

sábado, 12 de diciembre de 2009

Un dia más???


Media tarde, aún quedan horas para que acabe el día y ya puedo decir que fué un día, raro, extraño, especial.


A primera hora de la mañana acudía a una presentación, celebración. Y cuando una mujer que ha vivido todo un infierno tomó la palabra y su pequeño estaba a mi lado, me miró y me dió su mano. La cogí y una sonrisa brotó de su pequeña boca.
Me sentí extraño, feliz, pero triste por lo vivido por el. En un momento que no todo funciona bien, me dió fuerza esa simple sonrisa, esa pequeña mano que se aferraba a la mía con confianza.

Tras comer algo, y pasear entre las gentes que deambulan entre escaparates iluminados y aún sin saber muy bien por qué acabé en una de esas perfumerías de una cadena. Me encantan los perfumes, y las sensaciones que porporcionan los olores me encantan. Al pasar al lado de una mujer que vaporizaba su muñeca con un bote rojo de perfume me llegó un olor conocido. Y me vinieron recuerdos que estaban escondidos en mi interior, retales de tiempo vivido, no pude evitarlo, yo también vaporicé sobre mi antebrazo, y olí mi vida, mis recuerdos, y a pesar de mi soledad acompañado de tantas personas que paseaban por mi lado, mi mundo se limitó a mis recuerdos.

Una sonrisa se dibujó en mi rostro, y recordé la del crio de la mañana, y parado oliéndome mi piel con aquel olor a recuerdos, a amor pasado, una pantalla lanzaba imágenes de una serie pasada, de mi infancia pero que en mi vida actual tiene un significado diferente, "Pipi calzaslargas". Aquella niña peliroja, sonriente, con coletas jajajajja.
Y otro sentimiento de recuerdo y cariño me invadió. Y la sonrisa no me ha abandonado aún.

Recuerdos enlazados, y aún ahora estoy algo perdido, por las sensaciones que se agolparon en mí, ni siquiera se que quiero explicar con esta entrada, pero necesité escribirlo porque con esto creo que a pesar de pasarlo mal siempre nos queda lo bonito , para alimentar nuestro alma con esas sensaciones, con esos recuerdos.

Ojalá las personas que he llegado a conocer en mi vida tengan algún recuerdo bonito de mí, eso querrá decir que aunque les haya hecho daño sin querer les queda ese recuerdo , ese cariño y mi paso por este mundo no habrá sido en balde.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Miedo a dañar


Curioso cuando uno se cree con el poder de dañar. Y no porque lo haga a conciencia, sino que sin quererlo lo logra.

Y la persona dañada jurará que no es culpa de uno, pero el corazón así lo siente. Incluso podemos enterrar miles de palabras que jugueteaban por nuestro interior esperando su turno de salida. Palabras que, jajajaja, hacían cosquillas diciendo con un sonido mudo, "me toca, me toca".

Y esa desazón al haber vivido ya esa sensación. Al volver a hacer lo que te promestiste que jamás volvería a pasar.

Ni siquiera te vale pedir perdón porque seguramente la otra persona no te culpa de nada. Es nuestro espíritu que se retuerce dentro de su caja de aire, el que no deja se sentirse el inductor de una fantasía que hizo volar la alegría a alguien que sientes especial, pero que no amas.

Quien sabe tal vez sirva para amar de otra forma, y no de esa que deseé que anhelé y que tal vez me ofrecieron pero yo aún no estaba preparado a recibir. Aún sangraba mi cariño, aún respiraba un sueño que nunca fué un sueño que ya no soñaba pero que aún me dolía.

Duele una herida que se abre sin cicatrizar, cuando alguien la sutura y los puntos están ya echados esa nueva apertura es desgarrar la carne.

Ya no me importa mi sangrado, ni mi dolor, me dí cuenta que no es para mi ciertas cosas que otros gozan sin más, y lo acepto. Pero me mata saber que dañé , en la medida que sea me da igual.

No soy un cobarde, puedo hacer lo que sea, enfrentarme al mundo pero dañar a quien me importa, eso no . Y en eso soy un experto.

Pido perdón , una y mil veces. Siento haber abierto otra vez mi pecho, juro que no pasará más, no volveré a dañar a nadie. no volveré a dar un abrazo verdadero, duelen mucho, demasiado.

Mañana será otro día, de un tono gris como eran hace tiempo, como tal vez antes años atrás alguien me enseñó que era el color de mi paso por este mundo, así que no es ni malo ni bueno. Soy yo un valiente frente al mundo un cobarde frente a la posibilidad de causar dolor a quienes quiero.

Aunque tardeis mil años espero vuestra comprensión. Mirad a la luna y vereis que sigo mirandoos reflejados en su blanca cara.

Esta noche volveré a hablarle a la luna, la distancia hará que no pueda dañarla, incluso creo me atreveré a sonreirle, una sonrisa cómplice, pícara. Le prestaré el azul de mis ojos para que os guiñe antes de dormir, antes de que soñeis, ya sin mis palabras que tanto os confudieron, que tanto os hicieron llorar.







martes, 1 de diciembre de 2009

Mirando a los ojos de la LUNA


Hace un par de noches vi una luna brillante.

Hace un par de noches, o de madrugadas, o de dias. En realidad he aprendido a no medir el tiempo en ciclos acotados, simplemente sumo momentos. Sumo derramando esos momentos que jamás son iguales unos a otros.
Momentos de sonrisa, de lágrimas frente a la blanca luna, o de conversaciones mirándole a los ojos.

Me gusta mirar a los ojos de mi interlocutor, y los de la Luna son los ojos de miles de rostros, de miles de almas, de miles de seres que son y fueron, que fueron y no serán. Que serán lo que no fueron.

Quedan sobre su brillante piel la huella de miles, tal vez millones de besos que son encomendados a la Luna para que los entregue al ver a la persona destinataria.
Yo mismo pregunto cada noche a la Luna si recibió alguno para mi, pregunta que repito de madrugada al encontrarme frente a frente con ella. Permitidme que me guarde si los recibí o no alguna vez. Besos de mil colores y sabores, de algodón o de acero, dulces o ácidos , suaves o cortantes.

Y la Luna los entrega siempre, siempre con un sonrisa.Blanca sonrisa, blanca mirada,calidos rayos de Luna, que silban al cortar el cielo en busca de quienes , como yo, hablamos, preguntamos, lloramos y reimos con la Luna.

Y ese blancor, casi inmaculado, me hizo pararme, mirarla, y sonreir.
Siempre sonries, y ahora, hoy, ayer, me enviaste esa sonrisa. Una sonrisa que pude incluso oler, respirar, saborear. Senti que incluso se arrastraba por mis labios, por mi boca, impregnaba mi aliento de sonrisa blanca.

Y sonreí.
Noté que somos amigos, nada soy sin ti, la Luna donde cuelgo mis sueños, donde escondo mis frustraciones en su cara oculta.
Te irás irremediablemente, pero vuelves, unos dias llena otros casi no se te ve, pero ahí estás, y aunque las nubes te tapen, aunque no te vea, aunque no me ilumine tus rayos prestados del Sol, se que estas porque hasta el Mar con sus mareas, te siente. La Luna con ese poder de atracción que hasta el majestuoso mar lucha por llegar más cerca de tí. Y se que volverás, y se qu em eescucharás, y se que sabrás de los secretos de ella, de mi, de nosostros.

Yo prometo hablarte siempre mirándote a los ojos, porque al hablar contigo, lo que ocurra alrededor no me importa. En tu redonda blancura veo reflejado todo lo que me importa, todos los que me importan. Y entre todas esas imágenes, tu sonrisa, tu mirada.

Si encontrara tus labios, no dudaría en besarlos, en descubrir el sabor del beso húmedo de la Luna. Creí una noche que me besabas, fué un espejismo, o tal vez fué el beso más real que jamás me dieron.

Esta noche saldré a buscarte, sin prisas, sin miedo, sin frío. Mírame tú a mí, y diles que quienes pueda importar, a quienes pude importar alguna vez, que me viste sonreir, que me viste desear que llegue el mañana, mi mañana, y lo viviré . Lo hago mirándote a los ojos, de la forma en se dicen las cosas cuando no se miente. Cuando la esperanza se desborda por nuestros poros.

Vuelve mañana Luna, mañana seguiré aquí, sonriendo, regando mi interior que casi dejé secar, pero que al mirarte lo vi reflajado y no me gustó lo que vi. Y sabes???? pensé "no puede ser, quien me quiera y vea ese reflejo tambien estará triste". Y a vosotros, mis amigos , no quiero contemplaros tristres, a los que lo sois,a los que lo fueron,a los que lo serán.

Ven Luna cuéntame como están, pero hazlo mirándome tu tambien a los ojos como yo hago con mis amigos, como yo hago contigo.



domingo, 29 de noviembre de 2009

Con los ojos cerrados


Me gustaría poder escribir con los ojos cerrados. De esta forma la luz no podría engañarnos.

A veces las imágenes que percibimos están distorsionadas, por eso usamos gafas.

Pero quién vio alguna vez unas gafas para el alma?
Quien conoce unas lentillas para el corazón?

Poder escribir lo que sentimos, no lo que no vemos. Notar como salen las palabras de nuestro interior a nuestras manos, y así plasmarlas para que sean leídas.

Con los ojos cerrados se pueden sentir tantas cosas:
* Los rayos de la luna, acompañados de los deseos de tantas almas enamoradas
* El estruendo de los sueños cuando caen al suelo
* La vida que corre entre besos, nunca dados
* Los mordiscos del amor a cada uno de los latidos de la persona amada
* El corte de la guadaña de la Muerte, física o la peor de todas , la del alma...

y sobre todo la pena de esa persona que la esconde, que la disimula, porque es su único tesoro, lo único realmente suyo.

La pena que solo puede proporcionar la falta de alguien, ese alguien especial.

Ojala pudiera escribir con los ojos cerrados, encerrando mi mundo azul bajo mis parpados.

Ojala pudiera cerrarlos y ver felicidad, y asi sin luces engañosas escribirla.

Los cierro y no puedo escribir, los cierro y te veo, los abro y no estás aquí...



jueves, 26 de noviembre de 2009

Nada


Hoy es de esos dias en que escribo aquí sin saber el por qué, y lo que es peor, que no me importa no saberlo.
Simplemente hay veces en que necesitamos hablarnos a nosotros mismos, porque las palabras no salen, quedan atascadas en algun punto entre el alma y la garganta.
La sensación es de no saber el por que de nada, no tienes nada de que culpar a nadie, no tienes nada que contar.
Sientes que no comprendes que no formas parte de lo que te rodea simplemente estas. Ocupas un lugar en el mundo pero no tienes claro si es el tuyo o una noche fría recien nacido alguien te robó tu lugar y te dejó el que nadie quería y fuiste tan inocente que lo aceptaste aunque el sonido de la vida no te sonaba familiar.
Hoy veo el mundo como si yo pudiera ser invisible, y de hecho consigo serlo. Hoy hasta el dolor de cabeza es frío hoy incluso no me duele el dolor, no oigo el ruido, no veo luz y sin embargo duele, me afecta el estruendo de mi corazon al latir y me deslumbran luces de un blanco pálido.
Hoy no entiendo y lo que es peor no quiero entender, hoy simulo indiferencia, simulo no estar, simulo vivir. Esa parte es fácil, cojo aire y lo expulso, fácil no???
Solo que el aire que respiro está infestado de pequeños cristales que desgarran mi interior al entrar en mi.
Que duro debe ser morir por que tus pulmones se llenan de pena líquida.
Hoy espero nadie responda , nadie comente, nadie me lea.
Hoy escribo para que otro dia al leerme me diga , "mirate como estabas y que bien estas hoy".
Y si ese dia no llega... bueno, hoy hasta eso me da igual.

lunes, 23 de noviembre de 2009

Parar el mundo


Me gustaría poder saber donde está el interruptor que hace girar el mundo.
Necesito pararlo, solo un segundo, lo suficiente para bajarme de él.
Que deje de girar un solo momento para saltar, y llegar a mis fantasias.
Luego puede volver a girar, sin mí. Quiero recostarme en mis sueños, olvidar el paso del tiempo, que el tic-tac del reloj sean mis latidos.
Contemplar el cielo, contar estrellas, buscar cometas con su cola de sueños luminosos. Allí colgué los míos, y hoy dibujan tu nombre en el infinito.
Quiero tumbarme, sonreir sin miedo, cerrar los ojos y al abrirlos verte a tí. Como una rosa de rojo pasión, con sus espinas afiladas por el miedo a ser dañada, pero tan bella que a pesar del riesgo de pincharnos, queremos cogerla. Sentir el atercipelado tacto de los pétalos, su olor, que se transforma en aroma.
Mira rosa mía, elige una estrella, la que más brille, la que más ambiciones. La que más se parezca al brillo de tus ojos. Escoge bien pues en ella nos esconderemos cada vez que necesitemos saltar del loco mundo que gira y gira sin parar.
Ahora vuelve a cerrar los ojos, hay que volver . Saltar y retornar al mundo, la vuelta sin parar, no es necesario. Abrir los ojos y no ver mi rosa.
Pero no estaré triste porque reconozco la estrella que escogió, donde está, donde me espera, donde las lágrimas se transforman en pequeñas estrellitas que iluminan las oscuras noches, bailando alrededor de la luna.
Sonrío, solo debo parar el mundo un segundo y saltar a la estrella, a tu estrella , a nuestra estrella.

martes, 17 de noviembre de 2009

El Mar





El mar, mi mar. Vuelvo a el cada vez que siento que mi corazón se ahoga.


Su fresca brisa me habla, me susurra mil lugares con sabores distintos. Donde lanzar mi alma magullada, donde soñar abrazos solitarios.

Ver el sol aparecer e iluminar su agua, como si iluminara mi sangre, la limpiara del daño del olvido.

Cierro los ojos y abro los del alma, noto los primeros rayos del sol que bañan mi rostro, secando los rastros de miles de lágrimas.

Calienta mis labios, calienta mi sonrisa, mis ganas de vivir, de dar y recibir.

Mi mar, rompe contra la rocas, contra mis fantasmas, deshaciendolos como deshace la roca en arena. Transforma la dureza de la piedra en suave y cálido arenal.Donde caminar descalzo.

Moja mi cuerpo dolido, rejuvenece mi piel deseosa de sentir, de volver a ser amada, si es que lo fué alguna vez.

Humedece mis manos para que cuando acaricien esten limpias de vientos pasados, deja ese sabor salado de vida, de mar de Mediterraneo.

Mi mar dame una vez mas tu compañia, donde miles de almas fueron lanzadas en botellas cerradas esperando ser encontradas, con mensajes desesperados.

Cada ola es energía, que siento, que me ayuda. No volverás a verme arrodillado mi mar, envía tus mareas, aquí estoy , preparado para recibirlas para aceptarlas, para gozarlas.

Dame la fuerza de tus abismos, de tus habitantes que recorren el mundo sin tocar jamás tierra.

Mi mar, lanzo mi botella, haz que alguien la recoja que sepa de mi, que sepa que la pena se lanza al mar, para que viaje para que madure que cuando vuelva a ser encontrada, cuando alguien abra nuestra botella lanzada, ya no duela, solo sean recuerdos escritos, tal vez con sangre sobre el papel del amor. Pero con la tinta ya seca,ya no mancha, ya no ensucia.

Mi mar, siempre vuelvo a mi mar. Se que siempre estas, tus mareas no son mas que tus visitas a la playa a ver si estoy. Me encontraste escribiendo un nombre sobre la arena, un nombre que tus olas borrarán, poco a poco, subiendo por la arena. Dejarás la orilla una vez más límpia, sin rastro del nombre que escribí.

Gracias mi mar.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Un adios y mil preguntas


Creía que sería capaz de escribir una carta imaginaria despidiendome de quien debo alejarme y ni siquiera se por donde empezar. Imagino porque a pesar de lo que crean de mí no soy un mentiroso, y despedirme cuando no quiero hacerlo es escribir una gran mentira.

Pero por su bienestar, por su tranquildad debo hacerlo. Cada letra que escribo, cada tecla que oprimo es como un pequeño corte en mi corazón, tan pequeño que no es posible detectarlo para que sea suturado pero tan grande como para que se derrame la esencia del alma.

Ni siquiera llego a comprender el por qué.
Ni siquiera debo intentar comprenderlo.

Como se describe el temblor de las manos al leer algo que nos duele, nos enfria el aliento, que nos ralentiza el vivir??
Como se describe ese instante en que las lágrimas aparecen y dejamos de ver claramente la pantalla, para ver el rostro de quien escribió esas palabras que siente en su interior.
Como se puede explicar que esa sensación de impotencia, de rabia contra nosotros mismos, porque reconoces en tu interior la imposiblilidad siquiera de culpar a esa persona de su actitud.
Como podemos hacer que pase el tiempo más rapido para que llegue la cerrada noche. Deseando que hoy no luzca la luna, para que nadie nos vea llorar la despedida.
Como es el mañana sin su sonrisa?? Sin poder mirar entre las caras de la gente, por miedo a que nos descubra y sufra.

Donde está el tablón de anuncios del amor, de la amistad, del ofrecimiento sincero??
Donde se cuelgan los hasta siempre?
Donde los aqui me quedo por si me necesitas?
A quien se le pide que por favor haga feliz a esa persona?

Se agolpan las preguntas, taponando mi risa, esa risa que una amiga me regaló, que revive al alma, al corazón.

Regaré tu recuerdo con lágrimas, amargas hoy, dulces mañana, recordando tu risa, tus ojos, tu gesto travieso, tu caminar de pato mareao, jajajajaja.
Ves? Ya sonrío, tu ausencia dolerá, pero mi interior se quedará con lo bueno de tí, que es tanto y tanto.

Cuando encuentre tu alma, allá donde van las almas cuando dejan este caduco cuerpo, esperaré que saludes a tus seres queridos a tu amigo que consideraste de verdad, sin prisa, porque entonces... entonces tendré toda la eternidad para esperar que te gires y te vuelva a decir .Hola.

martes, 10 de noviembre de 2009

Extrañas sensaciones


Hoy escribo porque siento la necesidad de sacar una sensación extraña. Desde temprano tuve una sensación de tristeza, extraña, densa, sin explicacion aparente.

Como si viera detalles, gestos, intentos de evitarme. Al ser de parte de personas amigas, me parecieron raras, tanto como esa sensación que me invadía poco a poco, empapando mis huesos, hasta la médula. Dejando una sensación fría.

Y juro que no se el por qué, algo hice, algo aparenté, no lo se, lo juro.
La verdad es que nunca me importó que pueden pensar de mí pero, el pensar que he podido dañar a alguien especial sin ni siquiera enterarme me hunde en un valle de niebla espesa, que casi no deja respirar, casi no deja que el corazón pueda seguir latiendo.

Tal vez me este volviendo paranoico, no lo se. Y esa impotencia de no saber y no atreverme a preguntar, me seca el interior.

Si debo pedir perdón lo hago,pero desconozco que pude haber violentado. Tal vez no hice nada pero alguien especial este pasando por un trance, y mi alma lo note y me este avisando - "corre ayudala, te necesita"-.

No lo se, sigo sintiendo esa congoja y aún desconozco el origen. Sea lo que sea, sea de quien sea, debe saber que estoy aquí, para lo que necesite. Puedo apagar mi voz, pero no estoy mudo, esconderme, pero no desaparezco, puedo reir si necesita reir, llorar para qu eno llore a solas, puedo ser fuerte para que se apoye en mí, a la vez que tierno para que ese apoye sea mullido sobre mi amistad.

Ojalá solo sea una sensación.
Aquí estoy y aquí seguiré, esperando, ofreciendo lo único que tengo aún, mi vida, si fuera menester, si fuera necesaria para quienes considero que lo merecen y , en estos dias me dí cuenta que tengo "mi gente" que lo merece, a pesar de la distancia, real o la que existe entre nuestras existencias.

domingo, 8 de noviembre de 2009

Hola mi soledad


Hoy volví a mirar a mi alrededor, estaba solo. Quise comparar con ayer, rodeado de personas , y tambien allí estaba solo. Mi cuerpo entre la multitud y mi mente, mis pensamientos, mis anhelos, estaban lejos de allí.

Hola mi soledad, la que nunca me abandona, la que me acompaña en cada suspiro, en cada lágrima.
Ella que conoce cada sueño mío, quien mulle mi almohada húmeda, quien vela mi sueño, quien me escucha cuando mis gritos silenciosos suplican. Quien me coge las manos temblorosas tras sentirme tratado tan injustamente. Quien me ayuda a coser mis latidos a mi pecho, la que me susurra al oido , no sueñes, me tienes a mi y yo soy todo lo que tendrás. Y por um segundo me engaño y por un segundo me creo importante, y por un segundo... vuelvo a caer.

Hola mi soledad, te explico, te miro a los ojos de tu tenue olvido.

Hola mi soledad, vaciaré una vez más mis deseos en tí, miénteme una vez más por favor. Dime que se cumplirá mi más intenso deseo, aunque a la vez que lo formulo noto como resbala por mi espalda, arañando mi piel, mi existencia, mi futuro. Ese futuro que no poseo, no poseeré.

Hola mi soledad, mi compañera al ojear fotografias, imagenes de mi deseo. Miralas mi soledad pero no las toques, podrías contagiarlas de olvido y eso no lo permitiré.

Hola mi soledad, no te invité pero llegaste, no acepté tu compañia pero aquí te quedaste. Aquí estarás cuando deba despedirme de este mundo, de esta soledad.

Hola mi soledad, receptora de mis manos sobre tu cintura al dormir, la que enfría mi alma a la noche al no encontrar su cuerpo en el lecho abrazado a mi.

Hola mi soledad, tal vez amiga, tal vez carcelera, tal vez verdugo, o tan solo el alma de quien me quiso un día, o que al menos los restos de sus palabras, que al tocarme, que rozarme se pegaron a mí y no pueden desprenderse.

Escondete mi soledad, mañana será un día más. Mañana volveremos a engañarlos.Que no vean que solo estamos tu y yo. Volveremos a cerrar las puertas de mi alma, la encerraremos y acallaremos con palabras que no dejen pasar su aroma olvidado. Te pido mi soledad que no dejes que mis ojos sean el espejo del alma, porque si alguien los mirara se moriría de pena.

Vamos soledad, descansemos hoy, mañana volveremos a vivir nuestra mentira.
Te volveré a avisar cuando vea mi sueño, mi deseo y cuando estemos a solas, mirándo mi sueño en fotos , acariciando el papel satinado de la fotografía te diré. Maldita soledad, te odio y sin embargo debo quererte, porque eres quien a mi lado se quedó.
Cubreme una noche más con tu silencioso manto, pero por favor, no entres en mis sueños, allí, querida soledad tú no tienes sitio.

jueves, 5 de noviembre de 2009

Volver a levantarse



No ,
no quiero esconderme,
no quiero agachar mi mirada,
no quiero beber mis lágrimas,
no quiero apagar mis latidos,
no quiero vivir no viviendo,

no quiero odiarme más

Si,
si quiero estar aqui, ahí, a tu lado ni detrás ni por delante
a tu lado
donde están los amigos, donde están los ángeles de la guarda
hoy , mañana , siempre.

Si,
si quiero erguir mi cabeza, mirarte a los ojos,
aunque esquives mi mirada,
quiero ofrecerte mis limpios ojos azules como el mar ,
mi mar, tu mar
báñate en ellos porque en ellos estarás siempre a resguardo
ningún mal puedes esperar
quiero que se crucen sin miedo con los ojos verdes de las hadas.

Si,
si quiero llorar de felicidad, de melancolía, con sabor a piel de bebé
al recordar a quién se fué
quiero llorar a tu lado ,mezclar nuestras lágrimas
entrelazando nuestras manos.

Si,
si quiero oír mis latidos
acompasarlos con tu ritmo, quiero el diapasón de tu pecho
para unir mi vida a él
para que cuando el tuyo pare arrastre al mío
quiero hacer ese viaje a tu lado.

Si,
si quiero vivir, aunque tu decidas no estar en mi vida
quiero dar mi vida
toda , a pedacitos
quiero depositar en tus labios mi calor
que sepas, que sientas que vivo.

Si,
si quiero quererme
merezco quererme
tanto como yo quiero a otros seres que tanto me dieron
que tanto me dan.

A todos vosotros gracias
porque no encontré ese Dios del que hablan
del que dicen que habita allá en el cielo
si lo encuentro, si lo encontráis
darle las gracias por mi, de corazón
por haber hecho que os conociera
por haber creado unos seres tan maravillosos
como vosotras

Si tuviera que dibujar un ángel, te dibujaría a . Y si me preguntaran por las alas les diría que se fijaran bien, porque se ven plegadas sobre tu alma.






martes, 3 de noviembre de 2009

El tiempo


El tiempo, segundos , minutos, horas... momentos, esperas.

El tiempo largo, pesado, eterno si es esperandote.

El tiempo fugaz, destelleante, si es a tu lado.


El tiempo un espiritu líquido que se nos escapa entre los dedos , entre los pliegues de nuestro ser. Quisieramos tener más tiempo cuando somos felices. Nos sobra cuando estamos tan triste que lo regalariamos.

El tiempo, ese mentiroso que nos hace creer que su paso nos hará olvidar, y lo único que hace es amontonar sobre recuerdos, heridas, risas, alegrías, su polvo de estrellas.

El tiempo, mi tiempo, el tiempo que te regalo, el que espera sabiendose desesperado.

Podemos medir cuanto esperamos cuando esperamos lo que sabemos no llegará?


El tiempo , me invade, me deteriora, y sin embargo a mis ojos, te embellece.

El tiempo me enseña a esperar.


Tiempo de diferente intensidad. Bello,cálido, dulce como la brisa otoñal al recordar su paso a tu lado.


Mi tiempo pasado, es mío , me lo guardo me lo llevo a la eternidad.

Mi tiempo futuro, te lo regalo.

jueves, 29 de octubre de 2009

Un poema un sentir



Un recuerdo, una sonrisa, una alegría, un poema.

Una gran amiga me descubrió a este gran poeta, M.Hernández.
Y este poema es especial para mí. Hoy lo recordé mientras escuchaba una canción igualmente especial.

Lo ofrezco desde aquí a modo de agradecimiento a ella. Para darle las gracias por tantas cosas que merecen mi “gracias”.
Gracias por que cada dia, cada mañana, nos ilumina la existencia con su fugaz, pero maravillosa sonrisa.
Los que la hemos conocido sabemos que habrá valido la pena nuestro paso por este mundo cargado de tristezas, compensadas todas ellas, con creces, por haber gozado de su amistad.
No puedo más que decirle de corazón GRACIAS.


Fue una alegría de una sola vez

Fue una alegría de una sola vez,
de esas que no son nunca más iguales.

El corazón, lleno de historias tristes,
fue arrebatado por las claridades.

Fue una alegría como la mañana,

que puso azul el corazón, y grande,

más comunicativo su latido,

más esbelta su cumbre aleteante.


Fue una alegría que dolió de tanto
encenderse, reírse, dilatarse.
Una mujer y yo la recogimos

desde un niño rodado de su carne.


Fue una alegría en el amanecer
más virginal de todas las verdades.
Se inflamaban los gallos, y callaron

atravesados por su misma sangre.


Fue la primera vez de la alegría
la sola vez de su total imagen.
Las otras alegrías se quedaron
como granos de arena ante los mares.

Fue una alegría para siempre sola,
para siempre dorada, destellante.
Pero es una tristeza para siempre,
porque apenas nacida fue a enterrarse.


Miguel Hernández

lunes, 26 de octubre de 2009

Sin ruido






-No llores mamá- repitió una y otra vez sin ni siquiera darse cuenta que no se oía a sí mismo. Que lo que llegaba a su cabeza era su propio pensamiento. Fué extraño ver como las lágrimas de su madre eran como una película muda. Lo más doloroso, no volver a oir un te quiero de mamá.


Pero cuando algún sentido nos falla , agudizamos el resto e incluso, desarrollamos uno que teníamos escondido. Uno que tiene más que ver con el alma que con nuestro ser físico. Uno que nos permite reconocer el latido enamorado de un corazón, la pena del interior, la mentira escondida en palabras de amistad.


A sus 14 años ya no conocerá jamás como suena un te amo, como rie un bebé, como llora un crío que quiere un dulce. Pero a cambio, puede percibir el vibrar de un árbol, el latir de un corazón vivo, el miedo escondido tras sonrisas nerviosas.

Caminar sonriendo, llenandose de esas cosas que ya no valoramos, de olores, colores, respirando el aire fresco del bosque, sentir en su rostro la vida del planeta.

Quien es el minusválido? él o nosotros. Él que percibe sentimientos, o nosotros que nos dejamos guiar por nuestro egoismo, que nos engañamos, que pudiendo escuchar el grito desesperado de un amigo buscando ayuda, giramos la cara.

No oye nuestros "buenos dias", a cambio da un abrazo cálido, sincero. Y su rostro siempre sonriente, enamorado de la vida, del mundo. Con todos sus habitantes, animales, plantas, seres humanos, y esos seres no humanos.

En un mundo sin estridencias, sin gritos, vive él. Lo envidio, poder tener el silencio suficiente para oir nuestra propia alma, poder escuchar nuestros pensamientos. Poder comunicar con una mirada amor, miedo, incredulidad, felicidad.

Hoy me gustaría tener mi mundo, sin ruidos, solo con recuerdos, solo con imágenes de felicidad. Si no oigo su voz, no quiero oir. Ojala pudiera darle a él lo que ya no me llenará jamás de felicidad, ya oí demasiadas promesas rotas, demasiadas mentiras, demasiados reproches.

Levantaré mi muralla, que no deje pasar el sonido de fuera, no quiero oir más el sonido del odio, del rencor, de la bondad malinterpretada, la voz del mentiroso que levanta falso testimonio.

Algún dia lo echaré abajo, hoy no. Hoy quiero ser como él, no quiero ruidos del exterior, quiero poder oir mi alma. Poder comunicarme con ella, un alma que se seca por momentos sin todavía haber dado todo de sí. Hoy prefiero mi silencio al silencio de quién quiero oir.

Hoy deseo estar sin ruido, hoy somos iguales él y yo, enseñame a sentir, a oir no podré enseñarte yo. Y no te sientas especial por ello, hay tantas personas que pudiendo, no quieren oir, tal vez ya no tengamos nada que decirnos.

No, esa no es la razón. Aún tengo demasidas por decir. Pero ya no hay quien escuche...




sábado, 24 de octubre de 2009

Perdido



Perdido sin brújula no dejo de buscar mi rumbo.
Perdido sin guía no dejo de tropezar.
Perdido sin consejo no dejo de equivocarme
Perdido sin amor no dejo de morir.

sábado, 17 de octubre de 2009

Las palabras


Letras unidas en si. Formando palabras que pueden golpear, dañar o todo lo contrario, abrazar, besar tu alma, dar calor y felicidad.
Cuanto deseamos leer ciertas palabras, cuando odiamos leer otras. Y como otras llegan por sorpresa sin ser esperadas. Pero necesitamos tenerlas cuando provienen de alguien que queremos. Su ausencia nos hace sentirnos perdidos.

Como apagar la necesidad de comunicarnos con quien tenemos tanto que decir.

Como acostumbrarse a no leer sus palabras, esas mismas que estuvieron en su mente. Que nacieron del corazón tal vez. Que las creó para nosotros. Que por un momento, al nacer, sabemos que pensó en nosotros, reconocemos ese algo especial con el que quedaron impregnadas.

Palabras, ?las hemos inventado nosotros o simplemente las encontramos, en algún rincón de la esencia del ser?.
Tal vez sea lo poco que nos queda de un nacimiento casi místico del alma , en un tiempo que ni siquiera conocemos. Tal vez es lo único que nos queda de esa magia que antiguos druidas percibieron en rincones remotos del planeta.

Palabras que aún contienen esa pequeña parte de magia. Contienen una resina desconocida que hace que se peguen en nuestro interior. Palabras que nos marcan por su significado más que por su abundancia.
Una frase, una pequeña combinación de ellas será capaz de marcarse a fuego en las paredes internas de nuestro espíritu. Será nuestro recuerdo no visible al exterior. Y es mucho más nuestro porque aunque las digamos en voz alta nadie sabrá que significan en nuestra vida, a veces ni siquiera quien las escribió o pronunció se dará cuenta que salieron de ella. Que se quedaron con nosotros y ahí estarán acompañandonos hasta que extingamos nuestro aliento. Y no necesitaremos pronunciarlas en el último momento porque están escritas sobre nuestro corazón con la invisible tinta del recuerdo.

Lo increible es cuando nos ponemos a pensar, "¿qué palabras, que frase me dejaron realmente huella?". Y sale una frase que llevaremos hasta ese último momento sobre este azulado mundo, escrita dentro de nosotros y nos hará sonreir o dejar escapar una lágrima, cálida y dulce.
"Tenemos un problema. Tú también me ..." El resto de la frase me pertenece es para mi alma y para mí, así que no la acabaré por escrito. Son mis palabras
.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

El Paraíso



Su cuerpo sobre el lecho de inmaculadas sábanas frescas. El suave olor del blanco algódón, el olor de un deseo y su perfume. Su olor, me llega desde su piel desde sus poros. Miro como yace boca arriba, mirándome con su suave sonrisa, su increible sonrisa. Capaz de hacer volar la imaginación al escondido mundo de los sueños, de los deseos. Sus ojos, ese brillo de vida, mezcla de ternura y pasión contenida. Aquí está, la visión anhelada, deseada por mí. Mil veces más bella, más sensual, de lo que ningún mortal pudiera imaginar jamás. Su cuerpo, su ser, su esencia de mujer, esperando, ofreciendose con los gritos silenciosos de la piel.


Se que jamás tendré su alma, no poseeré su corazón, ni siquiera creo que sus recuerdos me tengan en cuenta mañana pero, hoy, hoy es mía. Hoy somos dos en uno. Hoy es mi mundo , hoy soy su mundo, su único mundo. Hoy quiero rebosar de ella, quiero que su olor me invada, quiero sentirla como nunca, como no será más. Pero no pienso en el mañana, el mañana no existe. Deja de existir en el momento que se transforma en el hoy, y hoy.. hoy soy feliz.


Me recreo mirándola, su boca, su bello cabello negro, sus ojos, su gesto pícaro de mujer. Debería tal vez ahogar las palabras que salen de mis labios sin posible vuelta atrás, palabras que suenan impulsadas por mi aliento, siento como pasan de mi garganta a mi boca, noto que son cálidas, y suenan sin prisas, sin estridencias, un "te quiero", que ni siquiera estoy seguro que haya llegado a percibir.


Mi mano acude a la llamada de su piel, su mejilla la recibe, la acaricio y su gesto por besar mi mano le da la bienvenida. El dorso de mi mano recorre su rostro, su mentón, su boca, sentir el beso que antes no llegó a materializar. Dulce. alargando el contacto de sus labios en mi piel, sus labios entreabiertos marcan mi piel, sin dolor, con placer.

Mi boca se acerca a sus labios. Un roce de su boca, la mía, y sus labios entreabiertos me invitan a entrar a un sin fin de sabores. Mezcla de calor, de salivas tenues, de pasión interna. Los ojos cerrados para que el sentido se centre en mi boca, en sus labios.
Separo mi boca, beso su cuello mientras mis manos acarician su cuerpo, arrastro mis labios por su cuerpo, sus hombros, su pecho. Deborando sus curvas de mujer, besando y dejando que mi lengua conozca el sabor de su piel mas femenina. Noto como mis caricias hacen reaccionar su ser, sus pechos erigen ese placer.

Absorbo su olor, mientras dejo el rastro de mi boca por todo su vientre, mis manos con vida propia acarician su fina piel, la suavidad de sus muslos.

Hasta sentir en mi boca el sabor íntimo de mujer, su húmedo secreto. Noto como vibra todo su ser, descargas de placer provocados por mis roces rítmicos, parando , volviendo a empezar. Oigo sus leves gemidos, siento sus manos en mi cabello , atrapándome para que no escape, no cese en ofrecimiento de placer.

Es mía, le ofrezco mis besos, mordiscos realizados con mis labios, en zonas tan sensibles que recibe a oleadas.

Sigo sin oír que pronuncie mi nombre, pero ahora mi mente solo esta por ella, por su cuerpo, por sus descargas de sensaciones. Mis manos acompañan a mi boca, se complementan para que sus leves gemidos, su respiración pesada se torne en gemidos mas sonoros.

Deshago el camino de mi boca esta vez hacia sus labios, me reciben sus manos en mi rostro , su boca esta vez plenamente abierta, ya no es una invitación ahora es mía. Sensaciones, placer, felicidad.

Mi cuerpo la cubre por completo, mi pecho sobre el suyo nota como persiste la reacción a mi roce, dureza placentera.

Paro un segundo, separo mi rostro, con el sabor de su saliva en mi boca, con el tacto de su lengua en mi boca, con su olor pegado a mi piel, con mi amor incrustado en el alma.

Comienzo a entrar en su ser, mirándola a la cara, a los ojos.
Abriendo un camino soñado, profundamente húmedo, cálido.
Noto que entro en el paraíso, en su paraíso, mi paraíso. En aquella habitación de hotel. Somos uno, un cuerpo, un alma, un sentir.

Cierra los ojos y solo deseo besarla, aprieta sus labios al percibir mis movimientos a un ritmo que me pide más y más. Un placer que se desbordará en borbotones.
La amo y lo sabe, pero mañana tal vez ni lo recuerde. Pero hoy es mía, hoy grabará a fuego mi piel, con pasión mi mente.

Hoy hago el amor posiblemente por última vez, tendré sexo con mujeres pero jamás haré el amor si ella no quiere volver.

Hoy es mañana. Ya el ayer pasó, el tiempo, la edad, me podrá pero su recuerdo, sus marcas en mi alma, no se borrarán. Las riego con lágrimas, abonadas con sonrisas al verla pasar. Ya no es ni será mía, tal vez nunca lo fué. Pero aquella mañana piel contra piel yo la amé. Aquella mañana ser contra ser me enseñó el paraíso sin necesidad de morir.

Su pasión , su cuerpo, sus besos, sus caricias... MI PARAÍSO

viernes, 11 de septiembre de 2009

Mañana volveré


Llego casi sin aire en mis pulmones, el oxigeno daña al entrar, cansancio. Cinco plantas sin ascensor, con un olor penetrante, fuerte, oscuro. Escaleras estrechas, con recuerdos de miles de pasos. Hoy vuelvo a visitarla. Golpeo la puerta , desconchada por el paso del tiempo, con sus molduras casi centenarias. Pasos tras la puerta, lentos. La puerta se abre, la señora Carmen me sonrie, su saludo un abrazo sincero. Sin falsos besos de roce de mejilla, un abrazo que vibra, un "gracias por venir" que me parece que no ha salido de su boca sino de su corazón.
-"Pasa, pasa. Hoy no estaba muy bien pero cuando te vea seguro cambia".
La sigo unos pasos atrás, aunque conozco de sobras el camino. Un recibidor con una percha de madera sin nada colgado. Un espejo con graciosos muñequitos alados que jamás supe que clase de criatura quieren emular.
El pasillo, largo, tal vez demasiado, estrecho, muy bajo aunque, para una persona de baja estatura y su hija Esperanza, en una silla de ruedas, no lo parece.
Dos golpes en la puerta y un "se puede?".
Me cede el paso y entro en aquella habitación, en aquel mundo, en su mundo. Su sonrisa me asegura que soy bienvenido.
-"Hooooola"
Un hola alargado , suave y calido, y el mismo gesto de la madre al abrir, un abrazo.
-"Mama trae cafe o lo que quiera. Sientate por favor".
Pero hoy no puedo, las prisas, los quehaceres me lo impiden. Pero vine a traerte papeles. Un mar de ellos ya he acercado hasta sus manos. Una explicación, breve, sin detalles, son buenas noticias y sobran las explicaciones porque confia que si viene de mi mano no es malo.
La miro mientras lo lee. 37 años, conozco la fecha de nacimiento por los papeles, unos 100kg, cabello moreno, limpio pero desarreglado, no hay maquillaje, por lo que no hay máscara, muestra lo que es.Un cuerpo condenado, atrapando dentro de él las ganas los deseos de ser "normal". Sentada, siempre sentada, frente a ese ventanal inmenso, frente a la única visión que tiene, que quiere del mundo exterior. Sentada, siempre sentada, porque un dia un mal golpe la postro de por vida, nunca habla de ello, nunca lo recuerda en público pero, estoy seguro que ella en soledad es invadida una y mil veces por un "como sería mi vida hoy si en vez de................"
Me alegra venir a visitarla, hablamos y me muestra lo que dibuja, lo poco que puede, el dolor la vence. Pero jamás se quejó delante de mí. Veo su cuaderno junto a su silla de ruedas, unas ruedas oxidadas, con los radios doblados, la goma empieza a estar cuarteada, no hay dinero para una renovación de su única forma de movimiento . Sus piernas siempre tapadas estarán tan cuarteadas como la goma de la rueda. Seguro dibujó algo pero hoy no puedo verlo , tengo prisa.
-"De todas formas no puedo enseñartelo, este no. Este es para mi, no debí dibujarlo pero lo hice. Pero solo puede ser eso, un dibujo"
No logro ver lo que es, pero en el hueco que deja el lápiz entre las hojas me parece ver parte de un corazón. Como los grabados en los árboles.
Debo irme, debo dejarla en su mundo, con su dibujo y sus sueños, sueños inalcanzables. Seguro mañana me muestra algún otro, porque sabe que somos amigos, porque sabe que mañana volveré.

martes, 8 de septiembre de 2009

Mi rincón



Pocas sensaciones me llenan tanto como poder pasear entre los arboles en esta época en que la brisa comienza a tornarse en el aliento fresco de la naturaleza.
Es como si el bosque empezara a despertar, curioso, cuando seguramente es todo lo contrario. Pero es algo difícil de explicar. Como si lo que despertara fueran las criaturas mágicas que seguro habitan entre el musgo, entre las hojas que comienzan a caer.
El olor de las plantas húmedas. Una humedad propiciada porque el sol ya no les castiga con sus rayos estivales.
No me siento un extraño, tal vez porque aquí nadie, ni nada, me juzga por lo que nunca hice.
Me dejo llevar por mis pasos, sin prisa. Escuchando el crujir de ramas secas bajo mis pies, el saltar de las ardillas sobre los arboles, la mirada escondida de las hadas que, temerosas de ser atrapadas, solo dejan oír su suave aleteo. Cada bocanada de aire llega a todos los confines de mi ser. A pesar de estar en un lugar en el que yo debería ser lo discordante , no me percibo así.
No conozco el nombre de los árboles y sin embargo los siento tan cercanos, tan allegados.Entre ellos el leve viento parece hablarme, ese mismo viento que miles de veces pareció susurrarme su nombre, incluso imitó su risa. Cuantas veces me he vuelto esperando encontrar su sonrisa, su bella figura de mujer, su bello rostro aparecer entre las ramas. Cuantas veces he deseado haberle podido enseñar mi rincón secreto.
Pasando entre unos arboles frondosos se llega a un pequeño montículo desde donde se domina toda la ciudad. Allí las agujas de la Sagrada Familia, el insinuante perfil de la torre de las aguas, avenidas donde en ese mismo momento miles de personas, de almas tal vez tan solitarias como la mía, deambulan por su vida. Cuantas serán felices? . Cuantas como yo , pensaran “que solo estoy entre tanta multitud”?
Y al fondo el mar.
Como me hubiera gustado poder subir aquí con ella, taparle los ojos justo antes de atravesar entre las ramas, con mis manos para sorprenderla con la vision de Barcelona a sus pies. El simple de hecho de recordar el tacto de su piel al poner mis manos sobre su cara a modo de antifaz para sorprenderla ,hace que me estremezca. Cuantas veces habré rozado a otras personas, cuantas veces lo hacemos a diario?. Un apretón de manos, un beso de amigo, un roce en un brazo incluso cogernos de las manos. Pero cuando ese roce hace que se nos erice el vello, hace que nuestra piel de un respingo, que nuestros ojos brillen con intensidad, cuando hace aflorar una sonrisa a nuestros labios, algo mágico hay. Algo que nos llega al fondo el alma. Ella consiguió que sintiera que cuando la rozaba, nuestras almas se hablaban, , se llamaban, se gritaban. Almas que deseaban unirse. Pero también está la razón y muchas veces , esa razón vence al alma. Y su razón , maldita mil veces su razón, es más fuerte que su alma.
Hoy la melancolía pasea conmigo por este bosque. ¡¡Ay!! la melancolía, trofeo del sentimiento al vencer a la razón. No me arrepiento de sentirte aquí amiga melancolía, me dices, me demuestras que aun tengo corazón. Que aun mis sentimientos luchan contra la razón. Esa razón que grita que olvide. Y se enfrenta a mis sentimientos que suplican que recuerde.
Y se que la victoria es de mis sentimientos...

porque la recuerdo.

jueves, 3 de septiembre de 2009

Pide un deseo



Tras caminar sin rumbo fijo por aquella vieja ciudad, llegué a un mercado ambulante que jamás vi antes. No soy un experto en rincones con encato pero conozco varios rincones encantadores y, esta calle estrecha no la conocía. No consigo encontrar ninguna placa que me informe de su nombre. En realidad no me importa. Me dejo llevar por los olores, los colores. El murmullo de la gente que curiosea, aqui y allá. En un puesto libros, juguetes muy antiguos, cromos, utensilios del hogar. Algunas cosas, casi, las había olvidado, recuerdo haberlas visto de crio.
Me hubiera encantado poder pasear de su mano entre tantas almas atrapadas en objetos. Cada objeto lo imagino en su lugar original, donde realizó el cometido para al que fué creado. Me hubiera gustado tanto jugar a imaginar historias con cada objeto. Una vez yo, otra vez ella. Pisandonos las historias a medida que las ideas nos salen a borbotones. Un puesto de telas de miles de colores, pañuelos de seda, mantones ya en deshuso, y su sonrisa entre ellas sería aún más bonita. Porque ningún tinte puede igualar su sonrisa pintada de rojo.
Sigo paseando, y pensando una y otra vez: "esto le gustaría, esto tambien".
Me paro en un puesto que solo se compone de una tabla, con una sábana azul, raída y descolorida. Cromos, etiquetas y espera!. Algo que me llama la atención, una vieja entrada a la Ópera de París, la entrada que materializa mi sueño más escondido. Un sueño que sé que no cumpliré, un sueño por compartir. Me entristece algo saberme excluido de mi propio sueño.
Me atrae la luz de otro puesto más alejado. Lámparas, con la pantalla casi quemada, pero con un encanto inquietante. En medio de ellas una lámpara especial, no es electrica ni luce. Una lámpara que bien podría ser la del cuento de Aladino. De cobre, un cobre ya oxidado, verdoso. Recondándome los tejados de las ciudades del centro de Europa que hubiera querido visitar acompañado. Vaya una tarde melancólica. Otro día os hablaré de la melancolía, mi amiga fiel, mi olor del alma.
La cogí en mis manos y manchádome de su color verde, impregnandome de ese olor metálico.
"Cuanto quiere?". Barata me parece, "tenga". Es mi compra mi tesoro. La miro mientras no dejo de caminar. Me quedo casi hipnotizado mientras la miro. Cuando me doy cuenta he salido del mercado, me giro. Nada. Tanto me he alejado que ni siquiera veo los últimos puestos.
Como un juego de infancia, mirando a cada lado para no hacer un ridículo casi dulce, me pongo a frotarla. A frotar mi vieja lámpara. Hasta que su viejo genio hace presencia. Tan viejo, tan cansado, tan hundido por haber sido usado para deseos materiales, para dañar a otros, que solo le queda un único deseo. Nada de tres, solo uno: "piénsalo bien". Si claro solo será un deseo. Ya sé, será el que más anhelo. Porque si lo pienso bien como dijo el genio, cual es mi deseo?.
Ya te tengo!!!!!!!
Llevo mi lámpara y la dejo en su portal, esta mañana cuando salga a trabajar, ella la encontrará. Ella pedirá el único deseo que le queda al viejo genio. Yo cumplí el mío, verla feliz al cumplir su deseo.

lunes, 31 de agosto de 2009

Yo no soy así


Por qué se empeñan en hacerme ver como no soy?

Nunca entenderé algunos por qué, al menos no hasta que alguien me explicara.

Las personas acostumbramos a encasillarnos unos a otros, decidimos si eres asi o de aquella otra manera. Lo peor es que no dejamos que esa otra persona nos entienda, porque simplemente decidimos y no les dejamos explicarse. A veces si escucháramos tal vez encontraríamos a un ser que pide a gritos una ayuda, que está tan desesperado, tan perdido, como nosotros mismos. Hay algo tal vez inducido sin darnos cuenta por otros que no nos permite ver más allá de lo que hemos decidido que son cada uno. Y no cuenta si has hecho tal o cual cosa , solo vemos lo que algo en nuestra cabeza nos dice que es. No vemos el daño que hacemos, lo feliz que puede ser esa persona con una simple sonrisa, con una palabra amable, con saberse al menos igual que los demás. No basta con ofrecer lo mejor de uno si ese otro no quiere aceptarlo. Y si ese otro te importa se transforma casi, casi, en crueldad. Aunque esa otra persona ni siquiera se de cuenta. Como avisar entonces a esa otra persona que su camino está equivocado?, como a visarla que quienes considera sus amigos , o al menos a quienes si se acerca, la están dañando ?, como hacer por compartir con quien deseas compartir. Porque despues de todo, de miles de desprecios, de miles de valoraciones equivocadas sobre nosotros, de miles de llamadas de ayuda veladas no respondidas, de ofrecimientos de corazón mal interpretadas, de haberle ofrecido incluso lo que uno mismo ha necesitado y no ha dudado en perder por ayudar , despues de todo eso sigues sabiendo que es el ser mas maravilloso sobre la faz de la tierra. Solo queda apartarse de esa persona, porque crees que aunque es ella quien no te quiere cerca, sabes que cree que tu presencia la daña.Y eso daña nuestra alma, nuestro corazón.

Porque se han empeñado en que esas personas nos vean así? Envídia de terceros?. Lo mejor una retirada aparente, pero jamás una desaparición porque, cuando los aparente amigos, los confidentes del momento, los alagadores temporales, desaparezcan. Cuando el desprecio les invada porque toca otra victima, cuando el cuerpo no atraiga las lascivas miradas, cuando el tiempo demuestre que no estuvieron alli en los momentos dificiles porque no quisieron, cuando las críticas a escondidas resurjan. Ahí seguiremos, no recordaremos que un dia nos dejaron de lado por que no querían esos amigos fugaces que así fuera.

En ese momento solo deberá girarse y ahí estaré con mi mejor sonrisa, con mi mano extendida, con mi ayuda y apoyo, porque pase lo que pase, seguiré sabiendo que somos amigos. Que ni un solo momento dejé de querer.

domingo, 30 de agosto de 2009

Nacimiento de un angel



Se escuchó el portazo, como un trueno. Como el ruido de las puertas del infierno al abrirse. La pequeña Cris, saltó sobresaltada de su mundo de muñecas. Se levantó y corrió a coger, a abrazar a su osito Popy. Su amigo, su escudo, su almohada para cuando se protegía en aquel pequeño armario. Un pequeño armario de dos hojas, dos puertas de fina madera que para ella, eran como puertas de piedra. Las puertas que la separaban de aquella riada de gritos, de golpes, de lloros. Y corrió y se escondió. Sus pequeñas manitas aferradas a Popy no dejaban de temblar. Mojó su pequeño pantalón y ni siquiera se dió cuenta. Sus piernecitas húmedas, plegadas, intentando arrinconarse, intentando desaparecer de aquel momento de aquel sentir.
Terror, palabra que no conocía y sin embargo era su vida. Si hubiera sabido rezar, pedir a un Dios cruel que nunca apareció. Lo habría hecho. Pero sus labios solo gimoteaban, solo tenian el sabor de sus pequeñas lágrimas, saladas, cálidas. Cayendo por un rostro que con 7 años debería tener dibujada una sonrisa, no una mueca fantasmagórica.
La luz entró en su pequeño mundo, en su pequeño armario. La silueta del diablo apareció, la silueta de quien debería tenerla en sus rodillas, debería besarla, y jugar con ella. No secarle la alegría, la vida.
Gritos, más gritos. LLoros, golpes y sonidos secos. El sonido de carnes ya desgarradas por la repetición del dolor.
Cris intenta salir, escapar, solo quiere ser lo que es. Una niña.
Popy la acompaña, no puede ser de otra forma, apretado contra su pechito parece que la quisiera proteger del mundo.
Alguien le coge del brazo, cae Popy.
-Popy, Popy
Entre sollozos el nombre de su amigo, un amigo que no responde, no se levanta, no huye. Un amigo empapado de lágrimas, lleno de sueños lanzados cada noche, cuando el silencio venía como un manto de paz a su cama.
Aventuras que no son, no fueron , no serán.
Un por qué, solo un por qué.
No hay respuesta, solo una sensación rara, impactante.
Cris cree haber volado, siente que no toca el suelo.
Su pequeño oído suena, se resquebraja.
Una mano, un puño de odio la golpea.
Se apagan las luces para Cris, no ve a Popy, pero tampoco ve la silueta del diablo.
Siente su mejilla fría contra el suelo, una sensación conocida.
Nota como los gritos, los ruidos, los golpes se desvanecen.
Sabor metálico en su boca, humedad cálida en su pequeño oido. Un oido sin memoria de un te quiero.
El aire no quiere entrar en sus pulmones, la vida, apenas estrenada, se va.
Pero aún queda un último golpe de fuerza para lanzar una palabra de despedida al infierno.
-Popy.

Su amigo, su escudo, su almohada.
Al fin puede salir de su refugio, ya no debe temer. El mismo diablo que le hizo sufrir la liberó del infierno.
Fué el diablo quien cambió la existencia de una niña, por el nacimiento de un angel.
Cris un nuevo angel.